Eros

Eros
Cuando te ví desnuda me devoraron los perros

domingo, 15 de febrero de 2009

Las Palabras

Dales la vuelta,
cógelas del rabo (chillen, putas),
azótalas,
dales azúcar en la boca a las rejegas,
ínflalas, globos, pínchalas,
sórbeles sangre y tuétanos,
sécalas,
cápalas,
písalas, gallo galante,
tuérceles el gaznate, cocinero,
desplúmalas,
destrípalas, toro,
buey, arrástralas,
hazlas, poeta,
haz que se traguen todas sus palabras.

Octavio Paz.

Biblia

De todos los murmullos el que más me gusta es el de las bibliotecas.Ttiqui tiqui, plaf, plaf, ssssssch, tak, bbrrrr. Una computadora excitada por las manos de alguien lejano, absorto en sus propios pensamientos, pasos que cada vez que avanzan se van diciendo silencio, un libro golpeado en un estante y una silla sacudida arañando el piso ofendida por la sorpresa de su ataque. Me gustan las voces que no alcanzan a ser voces, que hablan en susurros, como si la luz no entrara aunque sea de día y todo tiene que encontrarse a tientas. Los ojos rojos llenos de letras y polvo. Los escotes inapropiados sobre los muertos. Más que los libros me gusta la gente que escoge ese tipo de lugares para matar sus demonios a cuchilladas, riendo y llorando, con hastío o solemnidad.